Una reunión es, según bussinessdictionary.com, “una asamblea deliberativa de carácter formal e informal, formada por personas citadas para debatir determinados asuntos o problemas y tomar decisiones”

La reunión no es más que una herramienta de trabajo que hay que utilizar correctamente, comenzando por matizar que hay reuniones para propósitos diferentes.

La razón de ser de las reuniones es GENERAR valor, no CONSUMIRLO

Una reunión es un reflejo de la eficacia de un equipo y es una potente imagen de la cultura de toda la organización (enlazar con tema de Cultura Organizativa y Valores) y de la gestión de sus recursos más valiosos.

La invitación que te hacemos es a preguntarte:

1.- ¿Cuánto tiempo pasas reunido/a en la semana?  
2.- ¿Cómo es la calidad de la reunión y de las decisiones que se toman?
3.- ¿Cuáles son las reuniones recurrentes claves que tienen lugar?
4.- ¿Cuántas reuniones parecen no tener fin, no sacar nada o casi nada en claro, y te hacen acabar agotado/a?
5.- O bien, ¿cuándo se ha organizado una reunión, porque hay que hacer reuniones y se decide que, claro, todo el equipo tiene que estar presente, como siempre, y te das cuenta de que luego están con el móvil, con cara de aburrimiento o con cámara apagada y sus comentarios al salir son … ¡ha sido lo de siempre!?
6.- ¿Se definen funciones específicas durante la reunión?
7.- ¿Existen prácticas específicas de reunión?
8.- Y para terminar, ¿se realizan en tu entidad reuniones productivas e inspiradoras en las que se hable con el corazón y no con el ego?